Intramuros 17 de Enero

Corazón caballo loco rematado el de alguno…

A la iglesia protestante y similares, les dudo, no les creo y “mis católicos”? esperando al candidato, digo Jesús.

Me sueño sobre el viejo puente del cementerio, en la avenida 4, estoy en la acera oriente, 2 niños chaparrines como de 4 y 5 años intentan pasar a la acera opuesta. “Ahora!”, les indico, instándolos al cruce, considerando erróneo, es el momento pasen, obedecen y tarde me doy cuenta aparece de la curva un pick-up de los 50s, verde bajito. Asumo será irremediable los arrolle, en efecto los pasa por encima yéndose de largo, uno de los pequeños medio incorpora, el otro no. La charanga se sigue, yo intento infructuoso leer la placa, sólo alcanzo a ver entra por el portón de la casa de Don Rubén Rodríguez en la calle 9 hasta allí… No revela más el film sómnico. No recuerdo nada más. Como le decía no hace mucho a al-guien, los sueños son como mensajes que nos manda el subconsciente, no hay día que caminando por mi malecón sobre el arroyo wei del bulevar de la Avenida 6, “Chémali” Montaño, no aprieto las quijadas al ver la chorrera de carros poniendo en peligro el pase de la gente y de los chuchitos…..

Dos láminas y dos tubos sobre la calle 9, conformarían los 4 altos necesarios, para minorar la turbulencia del tráfico, pero nuestros cabilderos no ocupan el oro de su tiempo en cositas, ellos como Stalin van sobre lo macro, colosal, lo imponente, determinante y definitorio para el desenvolvimiento de nuestra frontera Agua. Pero, ¿qué no “las cosas pequeñas” no se dicen pero cuentan y cuentan muncho?”. Nomás no vayan a salir con la majada de topes, porque entonces sí las justificadas mentadas de los conductores serán cruz de sentencia que no terminarían con nuestro infinito siglo…

¿México Desunido?…

Creyeron los estrategas del fallido sistema sacarían raja del coyuntural arribo de Mr. Trump, elevando el paupérrimo 12% de aceptación del Presidente Peña, pero ya se ve que nomás nel, no ve la nación un líder nacional en su persona, de plano no. Cuando la Argentina perdió militarmente la soberanía sobre las Islas Malvinas ante Inglaterra, era gobernada por la genocida junta militar de los Grales. Galtierri, Viola y Videla, el pueblo gau-cho se unificó en torno a los asesinos gobernantes olvidando de momento los agravios de los milites para luchar contra los piratas anglos. Fue un apoyo multitudinario, irrestricto. El pueblo volcó patriota en defensa de la soberanía, sin embargo los generales ni para eso tuvieron gracia. “La Pérfida Albión” derrotó a las fuerzas argentinas que tiritando de frío y hambreadas gracias a la corrupción y desmadre, se rindieron y fueron desalojadas de las invadidas islas. Eso marcó la dictadura militar para su caída…

Ahora no es improbable al final Peña y secuaces terminen saliendo con las palas en el lomo, empezando con las conversaciones a la sorda con Mr. Donald Trump y su equipo “negociador”. Pues así capeó Peña en principio. La gente ya no se chupa el dedo, ha aumentado su percepción política, no se enreda, no confunde, insta, sin apoyo incondicional, exige postura firme, valiente, inte-ligente, digna a su autoridad máxima. Entiende una cosa es Juana y otra Chana…

“Arriba Peña” en el plano internacional… “Abajo Peña!” para el consumo interno, no al encarecimiento y gasolinazo. No a la corruptela pandémica. Al mismo tiempo que pide no al pago del muro mitológico. Si las cosas empeoraran hasta los extremos, no vacilar en alianzas universales con chinos, iraníes y con el mismo demonio, para evitar más trastadas, como las que siempre nos han hecho… nuestros “aliados”, según dijo el Presidente Peña Nieto…