Super corrupción en AMP y Montes de Oca terco pensando en el STJ

Por Lic. Jesús David Molina Bejarano

Con el nuevo sistema penal implementado a nivel nacional, se creía o cuando menos se planteaba que acabaría la corrupción galopante del anterior sistema… pero resulta y resalta que salió peor el remedio que la enfermedad.

El nuevo sistema ha resultado un fiasco, pues a la víctima no le queda otra que negociar y aceptar dádivas procedimentales, si no se queda sin el “caldo y sin albóndigas”, porque no habrá condena, ni detención, ni sanción ni nada de nada en contra del delincuente y en cambio éste saldrá muy campante por la puerta grande a seguir delinquiendo y bajo la estructura de un convenio, “convenido” prácticamente en forma forzosa ante la autoridad, si no la paloma se irá viva.

Las quejas a nivel nacional y local van en aumento día a día. En San Luis R.C. como en la mayoría del Estado la inseguridad va en aumento día a día; desde asaltos a mano armada, lesiones, robos, asesinatos, violaciones, narcomenudeo, repeticiones de asaltos y robos por las mismos delincuentes que ya se la saben que no habrá sanción si admites los hechos e insisten en un arreglo “amistoso” y prometen resarcir el daño y repararlo bajo promesa “jurada” ante el juez oral que lo harán “cueste lo que cueste” y obviamente como la ley establece que “a huevo” se le debe considerar y respetar ese derecho humano al delincuente, aunque sea un “empedernido, reiterado y sagaz, malévolo”, ratero y drogadicto.

Para la “justicia” pasa a segunda parte, porque se le previene por el juez oral, que si no arregla “corre” totalmente el riesgo de que la víctima no reciba nada u obtenga nada, si el delito está clasificado como no grave, y con esto ya nos “chingamos” todo mundo. De ahí, que la aberrante “justicia de mano propia” o de “ojo por ojo” se esté elevando y ya sea el medio “casi idóneo” para cobrarse las facturas a la delincuencia, mientras el Gobierno no hace nada por modificar en absoluto la aplicación en forma correcta de la ley.

Otra de las formas de corrupción que ya se está dando con el nuevo sistema, es el de entregar las “carpetas de investigación” que se integran en las Agencias del Ministerio Público en donde compete el delito a los abogados allega-dos, conocidos, compadres o afines a sus corruptelas. Dicha entrega comúnmente se hace por los “secretarios de acuerdos” que las “integran” y que pasan por sus manos y pueden fotocopiarlas a su conveniencia, muchas de las veces sin conocimiento del Agente del Ministerio Público y otras de acuerdo o a conveniencia. El fin de esa entrega a sus abogados afines, es el de sus allegados lleven a cabo la negociación o arreglo con las partes y propongan fácilmente un arreglo y la percepción de la reparación del daño, que obviamente a estos corruptos del servicio público, les toque la parte de la tajada correspondiente de sus abogados afines. Ya con la carpeta en sus manos, buscan a la víctima haciéndole saber y ver que ellos tienen la suficiente y bastante palanca en la “Agencia” para llegar a un arreglo rápido con el imputado y que perciban de in-mediato la “reparación del daño”, de ésa manera totalmente “antiética y corrupta” obtienes dividendos de acuerdo con los “abogados corruptos” y hostigadores de “clientes” confiados y que al final de cuentas vienen cayendo en el “garlito” y creen sus promesas y se desligan del abogado inicial para caer en las “garras” de esa “delincuencia gangsteril organizada” que al final de cuentas es eso, unos “abogansters”.

La facilidad para este tipo de “corruptelas” en las agencias del Ministerio Público se da debido a los “moches”, tratos, amigazgos del secretario con compadres y abogados afines y que se está volviendo una práctica cotidiana con el nuevo sistema, debido a que no hay ni existen “candados, ni registro”, ni límite de copias a expedir y simplemente se copia la carpeta de investigación y se le proporciona al grupo de abogados, despacho, amigo, compadre o afín, para que realice las gestiones con la víctima para que en su momento sean éstos los que le proporcionen el moche correspondiente al secretario de acuerdos en turno correspondiente. El único límite que tienen es el “silencio solapador” y el “valor entendido” entre ellos de callar la “acción corrupta” y antiética realizada en perjuicio del otro aboga-do, que la muchas de las veces queda en desventaja ante tal práctica gangsteril de matiz desleal y corrupta a todas luces.

Estas prácticas se están generalizando ya en ésta ciudad de San Luis como en todo el Estado, por lo cual urge que la Procuraduría General del Estado a través del titular, inicie una inmediata medida sobre estos corruptos y malos servidores públicos, tanto en las Agencias Investigadoras de Querellas y Denuncias, así como las nombradas como de los Sectores Uno y Dos en esta ciudad, que a través de sus Secretarios de Acuerdos hacen amarres y acuerdos con sus abogados afines para sustraer las carpetas de investigación y trastocar la sana y buena marcha de las investigaciones, así como la de implementar candados y seguridad cibernética en la expedición de las carpetas de investigación y evitar que personal que ha sido despedido de dichas agencias por corruptos, sigan allegándose normalmente asuntos en contubernio son sus “amarres” y compadrazgos habidos con los Secretarios de Acuerdos.

Ya que de por sí la Justicia anda coja, más con estos tipos de “abogánsters” tendrá que andar ya en muletas.

Muchos secretos se corren a “vox populi” en las Agencias del Ministerio Público que tienen a creer que la aplicación del nuevo sistema sólo da para los delincuentes que se les investiga y los delincuentes en ciernes que se encuentran en ellas….. He dicho…